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A la caza de un tesoro nazi sepultado a 20 metros

27 Feb
Un gigantesco taladro ha comenzado hoy a horadar el suelo de un bosque cercano a la localidad de Deutschneudorf, en la frontera entre Alemania y la República Checa. Busca dos toneladas de oro que, sospecha los investigadores, fueron escondidas ahí por los nazis al término de la Segunda Guerra Mundial. Los trabajos de excavación han comenzado en el lugar donde el fin de semana pasado los cazatesoros afirmaron haber detectado la presencia de metales preciosos a 20 metros de profundidad.

«La gente está fascinada. Se trata de objetos relacionados con la Segunda Guerra Mundial», ha señalado en la televisión Heinz-Peter Haustein, alcalde del pueblo y diputado liberal en el Bundestag (Parlamento federal). «Es bueno hablar de todo aquello porque la guerra no es un capítulo acabado y representa una ocasión para evocar el pasado», ha añadido ante numerosos curiosos mientras que la maquinaria ha empezado a horadar el suelo al pie de una pequeña colina, cerca de una estación abandonada.

La semana pasada el alcalde declaró a la prensa que el metal precioso se encuentra en una sima en una pared de rocosa que fue construida por el hombre y que ahora se encuentra semiderruida. La sima está conectada con un pozo que es al que están intentado acceder las máquinas. Los análisis realizados con aparatos electromagnéticos, según Haustein, han confirmado que el metal hallado no es hierro y que «solo puede ser oro, quizás plata».

Un radiotelegrafista de la Luftwaffe

«Puede tratarse de oro del salón de ámbar de los zares u otro tesoro», señaló el alcade, que desde hace años busca en las montañas que separan Alemania de la República Checa tesoros que los nazis pudieron ocultar cuando se produjo la caída del Tercer Reich. Haustein es apoyado en su búsqueda por Christian Hanisch, un buscador de tesoros aficionado del norte de Alemania, que basa sus investigaciones en anotaciones dejadas por su padre, radiotelegrafista de la Luftwaffe durante la Segunda Guerra Mundial.

Según Hanisch, su padre anotó las coordenadas de varios depósitos secretos en los que los nazis ocultaron supuestamente tesoros al final de la guerra y la sima artificial en la que presuntamente hay oro coincide con los datos apuntados por el soldado de la Luftwaffe. Fuente; El Pais.
¿Aparecerá el tesoro?.

Erna Wallisch, una criminal de guerra nazi

21 Feb
Erna Wallisch, la séptima en la lista de supuestos criminales de guerra nazis del Centro Simon Wiesenthal de Jerusalén, murió el sábado pasado en un hospital de Viena a los 86 años, informaron hoy fuentes de la fiscalía austríaca.

Wallisch era una de las prioridades en la «Operación Última Oportunidad», una iniciativa lanzada en 2002 para encontrar y juzgar a antiguos nazis, y la fiscalía había abierto una investigación preliminar tras obtener nuevos testimonios de víctimas de Polonia. La fallecida era alemana de nacimiento pero residió en Austria y obtuvo la nacionalidad de la república alpina tras el final de la II Guerra Mundial.

Wallisch estuvo destinada como guardia en el campo de concentración de Ravensbrück (Alemania) con 19 años, y en el de exterminio de Majdanek (Polonia), donde muchos documentos atestiguan que actuó de una forma especialmente cruel con la gente a la que forzaba a entrar en las cámaras de gas. A medida de los años 60 y principios de los 70 la Justicia austríaca la investigó pero no halló pruebas firmes para condenarla y concluyó que tuvo «un papel secundario» en Majdanek.

Después desapareció, hasta que el «cazanazis» Efraim Zuroff, promotor de la «Operación Última Oportunidad», recibió una carta anónima con una dirección en 2004 en la que alertaba de que «la diabla del campo de concentración» vivía en Viena. Zuroff, que relató a medios austríacos cómo dio con el paradero de la guardia de Majdanek, exigió a las autoridades que juzgasen a Wallisch, sin éxito. «Erna Wallisch y su familia pueden agradecer el largo fracaso de los distintos gobiernos austríacos para que al final no haya sido castigada por su papel en el campo de la muerte de Majdanek», aseguró hoy Zuroff en un comunicado.

El Instituto Polaco para la Memoria Nacional (IPN) facilitó en 2007 los testimonios de cuatro supervivientes: Danuta B., Ewa W., Janina W. y Jadwiga L., quienes aseguraron que fue cómplice necesaria para matar a miles de personas y se comportó con un sadismo atroz.

Los guardias obligaban con métodos expeditivos en los que se utilizaba la violencia extrema de forma arbitraria contra mujeres, ancianos y niños para que entrasen en
las cámaras donde se les asesinaba con el gas letal Zyklon B.

Majdanek, creado en otoño de 1941 para internar a prisioneros de guerra, fue una parte esencial del Holocausto y se transformó en otoño de 1942 en un campo de exterminio, justo cuando llegó Wallisch. Una superviviente del campo, Ewa K., citada por diarios austríacos, afirmó que era la más sádica y cruel, que su sola presencia despertaba murmullos de temor. «No tenía ningún reparo en golpear hasta dejar a la gente tendida en el suelo» -dijo- «ella es y será una criminal».

Otra testigo, Jadwiga L, aseguró que era conocida por sus ataques de furia, y que estando embarazada de un SS del campo golpeó hasta la muerte a un hombre con un palo con tal saña que su cabeza quedó en medio de un charco de sangre.

El texto que sigue se corresponde con el post de 5 de diciembre de 2007 del blogger herutt. El centro Simon Wiesenthal ha lanzado la «Operación Última Oportunidad«, una campaña destinada a encontrar criminales de guerra nazis en el cono sur americano. La campaña fue puesta en marcha durante una conferencia de prensa en la que estuvieron presentes el director del centro Wiesenthal en Israel, Efraim Zuroff; el representante para América Latina, Sergio Widder; y el presidente de la Comunidad Judía de Chile, Gabriel Zaliasnik. Se trata de la fase latinoamericana de una operación que ya se implementó en Europa y que ofrece 10.000 dólares a quienes aporten información util para encontrar a los criminales nazis ocultos en la región.

Según datos del Centro, entre 150 y 300 sospechosos de haber perpetrado crímenes de guerra lograron instalarse en Argentina, Chile y Brasil y otros países de América Latina, tras la derrota del Tercer Reich de Alemania en 1945. Algunos criminales de guerra podrían estar refugiados en Brasil según informaciones del centro Simon Wiesenthal, entre ellos Aribert Heim, uno de los nazis prófugos más buscados.

Heim, 93 años, trabajó como médico en los campos de concentración de Sachsenhausen, Buchenwald y Mathausen, y era conocido como el «doctor muerte» por sus crímenes durante el otoño de 1941 cuando asesinó a cientos de prisioneros con inyecciones de benceno en el corazón.

La captura de Heim tiene una recompensa de 310.000 euros, ofrecidos por los gobiernos de Alemania y Austria y por el Centro Wiesenthal. Datos que conduzcan a la captura y el enjuiciamento de otros criminales de guerra nazis serán recompensados con 10.000 dólares, precisó Zuroff.

Con esta iniciativa se evitarán casos como el del ciudadano croata Ivo Rojnica, aliado de los nazis y acusado de perseguir a los judíos, que murió el sábado en Buenos Aires, a los 92 años, sin ser juzgado por sus crímenes.

Rojnica era miembro del movimiento croata Ustasha, aliado de los nazis, y fue gobernador del distrito costero de Dubrovnik entre 1941 y 1945. «Habría sido justo que fuera juzgado. No hay pruebas de que mató a gente con sus manos, pero sí de que firmó órdenes de deportación» de judíos y serbios. Su muerte, según el director del Centro Wiesental, «es un fracaso del sistema judicial croata. Nunca formularon una inculpación, ni reclamaron la extradición», a pesar de que a las autoridades croatas se les recordó su presencia en Argentina hace dos años.

W.L Shirer. Diarío . EL HUMANISTA Y LA CRIADA

18 Feb


EL 14 DE SEPTIEMBRE DE 1939 APENAS HACIA DOS SEMANAS QUE EL TERCER REICH había iniciado su ataque a Polonia ; ese día, el corresponsal de la NBC en alemania, William L. Shirer, mantuvo la siguiente conversación – transcrita por el mismo – con su criada alemana, que había entrado en su habitación para expresarle lo terrible que le parecia la guerra:


-¿Porque los franceses nos están haciendo la guerra?
-preguntó la criada.
-¿Porque están ustedes haciendo la guerra a los polacos?. – Repliqué.
-Hum, dijo ella, con el rostro inexpresivo. – Pero los franceses son seres humanos. –
repuso finalmente.
– Y quizá los polacos tambien lo sean. -Objeté.
– Hum – respondió ella, inexpresiva otra vez.

FIESELER Fi 156 STORCH

26 Sep
Este avión de tipo ligero y de cualidades únicas, fue utilizado para su transporte personal tanto por Rommel como por Montgomery. «Es el aparato que más se parece a un helicóptero». Su despegue y aterrizaje cortos le permitían intervenir en el campo de batalla, en donde se le utilizaba en tareas de observación, recogida de heridos y para efectuar ocasionales bombardeos ligeros.

Para aterrizar precisaba solamente de una pista de unos 64 metros, pudiendo volar a velocidades tan limitadas como los 51 km por hora. Su motor Argus de 240cv, enfriado por aire, proporcionaba al Storch una velocidad máxima de 177 km por hora. Esto le permitía elevarse con vientos frontales muy suaves.
En 1943 se utilizó un Storch para llevar a cabo el espectacular rescate de Benito Mussolini por un comando de las Waffen SS liderados por el capitán Otto Skorzeny al posarse el avión en la terraza de un hotel de montaña en la cumbre del Gran Sasso. La alegria le duró poco al dictador italiano.

EL FUTBOL EN INGLATERRA DURANTE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL.

26 Sep
Al estallar la segunda guerra mundial en septiembre de 1939, todos los acontecimientos deportivos fueron prohibidos por un decreto sobre reuniones multitudinarias. En aquel entonces, eran muchas las personas que temían que la guerra relámpago de Hitler barreria a Inglaterra en pocos días.
El esperado y tan temido ataque nunca llegó y al cabo de un par de semanas, se empezó de nuevo a jugar partidos de futbol. La final de la copa de 1939 – 1940 disputada en el estadio de Wembley, hizo coincidir este esperado partido con la semana de la retirada de Dunquerque, es decir, mayo de 1940.

Con una asistencia limitada por las autoridades a 50.000 personas, asistieron 42.399 espectadores, incluyendo algunos supervivientesd de Dunquerque, a los que se les permitió el acceso sin pagar la entrada.
La primera parte de la temporada 1940 – 1941 fue más complicada. En no pocas ocasiones se producian interrupciones en los partidos debido a las alertas aéreas, y los tantos obtenidos se mantenían como resultados finales en los encuentros que había sido imposible terminar. En aquel momento, había 68 clubes en activo, pero su número aumentó en las siguientes temporadas. Algunos estadios sufrieron daños por las bombas. El más afectado fue el del Manchester United, el mítico OLd Trafford, que quedó fuera de servicio en el mes de marzo de 1941. La cancha de Swindon Town se convirtió en campo para prisioneros de guerra, la del Exeter City fue utilizada por el ejército norteamericano y la del Ipswich Town por la Royal Navy.